Las dietas ricas en carne podrían desencadenar exacerbaciones de colitis ulcerosa

Neil Osterweil

Conflictos de interés

29 de mayo de 2023

CHICAGO, USA. Nuevos datos procedentes de un estudio en curso muestran que el consumo habitual de carne está asociado a las exacerbaciones de la enfermedad inflamatoria intestinal, concretamente en pacientes con colitis ulcerosa.[1]

Los datos, que se presentaron el 7 de mayo en Chicago en Digestive Disease Week (DDW) de 2023, se basan en un análisis de los datos del estudio PREdiCCt sobre el efecto pronóstico de los factores ambientales en la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa, en el que observaron las dietas de pacientes con enfermedad inflamatoria intestinal por más de 2 o 3 meses con seguimientos de 2 años. Si bien el estudio en sí incluye a casi 3.000 pacientes del Reino Unido en remisión clínica, este análisis incluyó a 497 pacientes con enfermedad de Crohn y 520 con colitis ulcerosa.

El nivel más alto de consumo de carne notificado por los pacientes se asoció con el doble de riesgo de exacerbaciones fuertes (definidas como un aumento de los síntomas más una elevación de la proteína C reactiva [PCR] y de la calprotectina fecal más un cambio en el tratamiento de la enfermedad inflamatoria intestinal) en pacientes con colitis ulcerosa, indicó el autor del estudio, Dr. Charlie W Lees, Ph. D., del Western General Hospital y de la University of Edinburgh, en Edimburgo, Reino Unido.

Los investigadores también evaluaron la aparición de exacerbaciones "blandas", que se definieron como una respuesta negativa a la pregunta: "¿Cree que su enfermedad ha estado bien controlada en el último mes o desde la última vez que se conectó al portal?".

Tras una mediana de seguimiento de 1.481,5 días, se presentaron exacerbaciones "duras" a un ritmo de 5,6% anual, pero no hubo diferencias en función del subtipo de enfermedad inflamatoria intestinal. Sin embargo, las exacerbaciones blandas se acumularon rápidamente. Las exacerbaciones duras con niveles basales de calprotectina fecal en el intervalo de 50 a 250 µg/g, así como los niveles de calprotectina fecal superiores a 250 µg, se asociaron a exacerbaciones.

La ingesta media inicial de proteínas totales fue de 91,9 g al día, de las cuales 35,8 g procedían de fuentes animales. El hazard ratio para el cuartil más alto frente al más bajo de ingesta de carne en el grupo con colitis ulcerosa fue de 2,08. No halló ninguna relación entre las exacerbaciones duras y la ingesta de fibra dietética total, ácidos poliinsaturados N-6 o alimentos ultraprocesados, lo cual sorprendió al Dr. Lees.

"Quizá lo más curioso es que, cuando observamos la ingesta de alimentos ultraprocesados, no hay diferencias en la enfermedad de Crohn ni en la colitis ulcerosa", señaló el Dr. Lees.

El hallazgo contradice un estudio presentado en el Crohn’s & Colitis Congress de este año, según el cual los aditivos de los alimentos ultraprocesados parecen tener efectos deletéreos en la microbiota intestinal, mientras que otros pueden ejercer su influencia a través de mecanismos como la lesión endoplásmica.

Sin embargo, los nuevos datos concuerdan con una asociación notificada anteriormente entre el consumo de carne y la aparición de colitis ulcerosa, e indican que reducir el consumo de carne podría ayudar a disminuir el riesgo de exacerbaciones en pacientes con colitis ulcerosa.

PREdiCCt está diseñado para examinar los factores dietéticos, ambientales, genéticos y microbióticos asociados a las exacerbaciones de la enfermedad en pacientes con enfermedad de Crohn o colitis ulcerosa. Los investigadores están evaluando la posible contribución de la enfermedad de la ingesta total de proteínas animales, la fibra dietética, los ácidos grasos poliinsaturados N-6, los emulsionantes dietéticos y los alimentos ultraprocesados a las exacerbaciones, así como el recuento total de genes bacterianos en muestras de heces. Su objetivo es examinar los datos de 2.500 muestras de microbioma que se están secuenciando actualmente en el Instituto Wellcome Sanger de Hinxton, en Inglaterra, para determinar si la asociación entre la carne y las exacerbaciones de colitis ulcerosa podría estar relacionada, como ellos plantean, con alteraciones del microbioma intestinal inducidas por la dieta.

El Dr. Russell D. Cohen, director del Centro de Enfermedades Inflamatorias Intestinales de la University of Chicago, señaló que es una investigación preliminar con muchas interrogantes sin respuesta.

"Creo que todavía tiene que evaluar muchos de los datos que ya ha recopilado porque, ¿se está hablando de carne? ¿Se trata de aves de corral? ¿Se trata de pescado? Es interesante, pero hay que seguir evaluándolo antes de tomar decisiones concluyentes", afirmó el Dr. Cohen, quien no participó en la investigación.

Agregó que el presunto efecto del consumo de carne en la exacerbación de la enfermedad parecía tardar años, "lo cual es un poco sorprendente. Si realmente pensáramos que la enfermedad inflamatoria intestinal se debe a algo en la dieta, veríamos la respuesta de inmediato, así que no se corresponde con el tiempo. ¿Por qué tarda 5 años? Debería ser en 5 semanas o 5 días".

El Dr. Lees declaró tener relaciones económicas con Abbvie, Takeda, Pfizer, Galapagos y BDD Pharma, entre otros.

La DDW está patrocinada por la American Gastroenterological Association, la American Association for the Study of Liver Diseases, la American Society for Gastrointestinal Endoscopy, y la Society for Surgery of the Alimentary Tract.

Este contenido fue originalmente publicado en GI and Hepatology News, parte de la Red Profesional de Medscape.

Para más contenido suscríbase a nuestros boletines y siga a Medscape en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube.

Comentario

3090D553-9492-4563-8681-AD288FA52ACE
Los comentarios están sujetos a moderación. Por favor, consulte los Términos de Uso del foro

procesando....