Una nueva revisión sistemática española ha estudiado el impacto de los distintos tratamientos de fisioterapia para el síndrome de cordones fibrosos axilares y encontró que:[1]
Los ejercicios de fisioterapia y los estiramientos son los tratamientos más eficaces. Restablecen la amplitud del movimiento más rápidamente, reducen el dolor y las discapacidades y mejoran la calidad de vida.
¿Por qué es importante este estudio?
El síndrome de cordones fibrosos axilares es una secuela del tratamiento quirúrgico del cáncer de mama. Este puede tener un impacto significativo en la funcionalidad y calidad de vida de las pacientes, y puede retrasar el inicio de tratamientos oncológicos.
El cáncer de mama es la neoplasia más frecuente en mujeres y en 2023 se estiman 35.001 nuevos diagnósticos, según datos de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM). Para su tratamiento existen diferentes opciones: tratamiento quirúrgico, quimioterapia, tratamiento hormonal y radioterapia.
Entre los efectos secundarios del tratamiento quirúrgico se encuentra la aparición de cordones fibrosos axilares, secuela independiente de la aparición o no de linfedema. Puede aparecer en las primeras 8 semanas tras la cirugía y suele resolverse a los 3 meses tras su aparición. Suele manifestarse como la aparición de un cordón en la axila, aunque puede aparecer a lo largo de la extremidad superior. El diagnóstico suele realizarse mediante pruebas de imagen, siendo la ecografía el método más fiable. En cuanto a la clínica, se caracteriza por la presencia de dolor al abducir y flexionar el hombro, limitando la movilidad del miembro afectado.
Metodología
Se realizó una revisión sistemática de la literatura. La investigación se realizó utilizando las bases de datos PubMed, Scopus, CINAHL, PEDro y Web of Science entre enero de 2022 y marzo de 2022. Se incluyeron todos los ensayos controlados aleatorizados y los ensayos clínicos controlados.
Para comparar la eficacia de las intervenciones se calculó la mejoría utilizando las escalas validadas para la calidad de vida, para la discapacidad del brazo y para el dolor. Además se utilizaron herramientas para valorar la funcionalidad y el rango de movimiento.
Resultados principales
De los 188 artículos identificados se seleccionaron finalmente 9 estudios (con 661 pacientes), que proponían tratamientos basados en ejercicios y estiramientos, fisioterapia manual, y la combinación de fisioterapia manual y ejercicios. El periodo de tratamiento varió entre tres y 54 semanas.
Los ejercicios de fisioterapia y los estiramientos son los tratamientos más eficaces. Restablecen la amplitud del movimiento más rápidamente, reducen el dolor y las discapacidades y mejoran la calidad de vida.
La fisioterapia manual, el masaje cicatricial y la liberación miofascial podrían ayudar a mejorar los resultados, pero con peores resultados.
El dolor fue el único resultado que mejoró significativamente tras la instauración de la fisioterapia.
Conclusiones
Se requiere de mayor investigación en este campo, con mejor clasificación del síndrome en las pacientes posoperadas y con el diseño e implementación de estudios aleatorizados con muestras de mayor tamaño para aportar datos más concluyentes que sirvan de base a las mejores prácticas para el tratamiento de este síndrome.
Este contenido fue originalmente publicado en Univadis, parte de la Red Profesional de Medscape.
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CRÉDITO
Imagen principal: Dreamstime
Medscape © 2023
Citar este artículo: El valor terapéutico de la fisioterapia en el síndrome de cordones fibrosos axilares tras cáncer de mama - Medscape - 5 de mayo de 2023.
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