Por desgracia, las fiestas navideñas no están libres de alérgenos. La Dra. Bettina Wedi, profesora de la Facultad de Medicina en la Gottfried Wilhelm Leibniz Universität Hannover, en Hannover, Alemania, explica en un artículo a qué se debe prestar atención en los días festivos desde el punto de vista alergológico.[1]
En su artículo la autora se centra en la decoración navideña con plantas y en ciertas frutas o alimentos que pueden desencadenar síntomas alérgicos.
¿Qué hay detrás de las "alergias navideñas"?
Alergia a la flor de nochebuena
Un ejemplo de este tipo de "alergias navideñas" es la provocada por la popular flor de pascua o nochebuena (Euphorbia pulcherrima). Se han descrito reacciones alérgicas de tipo inmediato mediadas por inmunoglobulinas E (IgE), como rinoconjuntivitis y asma bronquial en pacientes alérgicos al látex. La explicación que da la facultativa, es que la flor de nochebuena pertenece a la familia de los tártagos, cuyo alérgeno del látex puede transmitirse por vía aérea a través del polvo doméstico. En esta familia de plantas también encontramos otras que contienen alérgenos del látex, como el árbol del caucho.
Según la Dra. Wedi, las alergias al látex afectan sobre todo a personas con profesiones sanitarias, pero también a otras personas sensibilizadas por su uso. La alergóloga señala que alrededor de un tercio de los alérgicos al látex presentan una reactividad cruzada a distintas frutas ("síndrome látex-fruta"), como el aguacate, el plátano, el melocotón, la papaya, el mango, el tomate, el pimiento, el kiwi y la castaña dulce.
A partir de los años 90, la epidemia de alergia al látex disminuyó considerablemente gracias al uso de guantes sin polvo y con proteínas de látex reducidas. Hasta la fecha se han identificado 17 alérgenos del látex. El diagnóstico de IgE con alérgenos únicos recombinantes es un instrumento útil para el diagnóstico de la alergia al látex, especialmente teniendo en cuenta que los extractos de látex para las pruebas cutáneas ya no están disponibles comercialmente.
Otra planta relevante desde el punto de vista alergológico es el cactus de Navidad o Santa Teresita (Schlumbergera), de la familia de las cactáceas (cactus). Su nombre hace referencia a la época de floración típica de la planta en torno a la Navidad. Además de rinoconjuntivitis y reacciones respiratorias, también se ha descrito urticaria de contacto, pero hasta ahora solo en casos de contacto ocupacional muy intenso, por ejemplo, al trabajar en el cultivo de cactus.
Alergia al árbol de Navidad
El árbol de Navidad también puede desencadenar una reacción alérgica, concretamente una "dermatitis de contacto aérea". Las zonas de la piel sin ropa suelen ser las más afectadas, sobre todo la cara y el cuello. Esta reacción es una reacción eccematosa mediada por células T de tipo tardío causada por alérgenos de contacto transmitidos por vía aérea. Sin embargo, esta forma especial de alergia de contacto causada por un árbol de Navidad solo se ha descrito en raras ocasiones.
Los pinos, abetos y píceas contienen aceite esencial de trementina y resina de árbol colofonia. Estos se encuentran entre los diez alérgenos de contacto más frecuentes. Las personas alérgicas a la colofonia obviamente no lo tienen fácil en esta época del año. También podrían reaccionar con el ácido abiético, los alquitranes de madera, el bálsamo de Perú, el alfa-pineno y la trementina. Según la Dra, Wedi, alrededor del 3,5% de los adultos podrían están afectados, pero también puede ocurrir en niños y adolescentes. El nombre de colofonia procede de la ciudad lidia de Colofón, conocida por la destilación de resina, explica la autora. La colofonia endurecida con una proporción de ácido abiético de alrededor del 90% también se utiliza como resina de violín con las correspondientes alergias de contacto en violinistas o como cera adhesiva para deportistas, informa además la Dra. Wedi. Incluso al envolver regalos, los alérgicos a la colofonia deben tener cuidado. ¿Por qué? La cinta adhesiva podría contener derivados de la colofonia. Sin embargo, debido al tiempo y lugar de contacto normalmente limitados con la cinta adhesiva, no cabe esperar un eccema alérgico de contacto.
Según la alergóloga, las afecciones respiratorias o rinitis causadas por el árbol de Navidad, en el sentido de una alergia mediada por IgE de tipo inmediato son una rareza. Posiblemente están causadas por una contaminación del árbol relacionada con el almacenamiento con ácaros del polvo doméstico, epitelios de animales o mohos. Los adornos navideños almacenados durante todo el año también podrían estar contaminados con ácaros del polvo o alérgenos del moho.
Alergias de contacto
Para muchas personas, la luz y el aroma de las velas forman parte de la Navidad. Pueden aparecer alergias de contacto si las personas fabrican sus propias velas de cera de abeja o utilizan esmaltes o productos externos que contengan cera de abeja. Según la experta, también son problemáticas las velas perfumadas, los espráis ambientales, los aceites para lámparas aromáticas, los perfumes, las bolsas de basura y de aspirador perfumadas, la arena para gatos y los artículos de decoración. En algunos casos, no se indica bien qué fragancias contienen. Las fragancias, como alérgenos de contacto, podrían provocar eccema (reacción de tipo IV, reacción de tipo tardío) en caso de contacto con la piel.
CRÉDITO
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Citar este artículo: Navidad, una celebración con riesgos para las personas con alergias - Medscape - 22 de dic de 2022.
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