En un reciente ensayo controlado se compararon los resultados de los pacientes de un Servicio de Urgencias que sufrían dolor.[5] Un grupo recibió visitas de diez minutos de un equipo de perros de terapia y otro no; los dos grupos recibieron una atención similar. El grupo que recibió la intervención con perros de terapia observó cambios significativos en el dolor y la ansiedad, así como en la depresión y el bienestar, en comparación con el grupo de control.
No se registraron diferencias antes y después de la intervención en cuanto a la frecuencia cardiaca o la presión arterial en ninguno de los dos grupos.
La terapia con mascotas, especialmente con perros, puede ser eficaz; sin embargo, una precaución importante es que algunas personas han experimentado acontecimientos dolorosos con los perros. A menudo, han sido mordidos. Por tanto, hay que indagar si las experiencias o reacciones del paciente a los perros prevén un episodio tan molesto.
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Citar este artículo: Mini-examen clínico: Ansiedad - Medscape - 19 de dic de 2022.
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