En ACC Latinoamérica 2022 junto con CardioAcademic, el Dr. Carl Pepine enfatizó que la mayor amenaza para la salud de la mujer no es el cáncer de mama ni otros tipos de cáncer, sino la cardiopatía isquémica, pues mientras que una de cada tres mujeres fallecerá por una enfermedad cardiaca, una de cada dos lo hará por una cardiopatía isquémica.[1]
Agregó que la cardiopatía isquémica no está disminuyendo entre las mujeres más jóvenes y no hay información suficiente para que se reconozca la patología, por lo que es indispensable mejorar las campañas de educación entre la sociedad.
"Es claro que esta afección está relacionada con la inactividad, la obesidad y la falta de reconocimiento de los factores de riesgo exclusivamente femeninos, como diabetes gestacional, hipertensión gestacional, preeclampsia y síntomas cardiacos sin obstrucción de la arteria coronaria, que es ahora la forma más frecuente de cardiopatía isquémica, por lo que debemos educar para atender a tiempo, para mejorar la calidad de vida de las pacientes", expuso el médico.
Subdiagnóstico y atención médica no equitativa
La enfermedad coronaria no obstructiva en las mujeres no tiene un comportamiento benigno, además se enfrenta al subdiagnóstico y a factores sociales como una menor capacidad de atención debido a la falta de seguridad social, coincidieron tres cardiólogas mexicanas en la sesión plenaria del Dr. Carl Pepine.
La Dra. Julissa Martínez, especialista en cardiología, comentó que la enfermedad coronaria en las mujeres está subdiagnosticada porque se subestiman los factores de riesgo y a pesar de la evidencia que indica que el pronóstico es peor en mujeres que en varones, la atención médica no es equitativa.
"Aunque existe alto riesgo de que las mujeres desarrollen enfermedad coronaria, no reciben el tratamiento adecuado que indican las guías, algo muy importante, porque hay cierta disparidad en el tratamiento y no solo en el momento del evento isquémico, sino en las complicaciones que vemos después, cuando hay una enfermedad vascular cerebral en que las mujeres pueden tener riesgo de fallecimiento súbito y aun así el tratamiento es subóptimo", subrayó.
Añadió que no basta con una mejor educación hacia los pacientes, sino que el equipo médico debe estar al tanto de las actualizaciones clínicas, desde los cardiólogos hasta los médicos que están en las salas de emergencia.
"Este es un paradigma que tenemos que cambiar; ver una angiografía sin lesiones no implica que ahí terminan el protocolo de estudio y el tratamiento, sino que es necesario hacer más por tener el diagnóstico adecuado, por lograr controlar a la paciente y es muy importante que una vez establecidos diagnóstico y tratamiento existan terapias de rehabilitación cardiaca, porque lamentablemente es una penosa realidad que las mujeres la reciben menos que los hombres", remarcó.
La Dra. Ana Berni, especialista en electrofisiología, acotó que las mujeres tienen mayor tendencia a inflamación y enfermedades autoinmunes y resaltó que en Latinoamérica los factores psicosociales impactan negativamente en la salud cardiovascular del sexo femenino.
"En la región es más difícil que las mujeres accedan a los servicios de atención, por tanto, la capacidad de complicaciones es mayor y ya hay estudios comparativos entre mujeres y hombres que indican que se atiende mucho más a los hombres que a las mujeres, están dados de alta en la seguridad social y eso también se debe considerar como factor de riesgo para la enfermedad coronaria", destacó.
La Dra. Gabriela Borrayo comentó a Medscape en español que el subdiagnóstico que existe en la cardiopatía isquémica en las mujeres tiene que ver con que los estudios y el tratamiento que se tendrían que hacer de manera exhaustiva para lograr la prevención secundaria no se hacen, no solo en México, sino en la región.
Lo que consideró alarmante, puesto que 50% de las mujeres que tienen un infarto tendrá una consecuencia. Mencionó que es momento de correr la voz de que la cardiopatía en la mujer no necesariamente tiene que ver con obstrucción coronaria y no se va a descartar la enfermedad microvascular, lo que es relevante, porque un pronóstico puede ser igualmente fatal cuando no hay enfermedad obstructiva, pero sí microvascular.
"Este nuevo horizonte de hacer una estratificación temprana exhaustiva del riesgo cardiovascular en la mujer es fundamental, es algo que tenemos que hacer y sin duda el ensayo clínico nos permitirá ver cómo ese manejo exhaustivo con estatinas, con calcioantagonistas o beta-bloqueantes y el uso de antiplaquetarios, puede ser un cambio muy importante en el pronóstico de las mujeres con esta enfermedad", concluyó.
Las Dras. Borrayo, Berni y Martínez han declarado no tener ningún conflicto de interés económico pertinente. El Dr. Pepine declaró que algunos de sus proyectos sobre enfermedades cardiovasculares en mujeres han sido financiados por la industria y los National Institutes of Health con financiamiento federal continuo para investigación revisada por pares.
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CRÉDITO
Imagen principal: Dreamstime
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Citar este artículo: Factores psicosociales y menor capacidad de acceder a servicios de salud impactan en tratamiento de enfermedad coronaria en la mujer - Medscape - 27 de sep de 2022.
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