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La disfunción cognitiva encabeza la lista de quejas neurológicas en pacientes con COVID-19 persistente cuya enfermedad no fue lo suficientemente grave como para requerir hospitalización, pero no es el único problema, según muestra una nueva investigación.[1]
Los investigadores que siguieron a 100 pacientes ambulatorios con COVID-19 persistente de mayo a noviembre encontraron que 85% informó cuatro o más síntomas neurológicos.
"Es el primer estudio de su tipo sobre síntomas neurológicos que aparecen en pacientes no hospitalizados", dijo a Medscape Noticias Médicas el autor principal, Dr. Igor Koralnik, profesor de neurología en la Northwestern University, en Chicago, Estados Unidos.
"La mayor parte de lo que sabemos hoy sobre los pacientes con COVID-19 persistente es lo que está sucediendo en pacientes gravemente enfermos en el hospital", agregó el Dr. Koralnik.
El estudio se publicó en la versión electrónica de Annals of Clinical and Translational Neurology.
Síntomas persistentes y debilitantes
Los pacientes que estudiaron tenían síntomas clínicos consistentes con COVID-19, puntualizó el Dr. Koralnik, pero solo síntomas respiratorios leves y pasajeros. Ninguno desarrolló neumonía o hipoxemia que requiriese hospitalización.
El diagnóstico de COVID-19 persistente se definió como la presencia de síntomas que se mantuvieron durante más de 6 semanas, con el consenso de que la mayoría de los pacientes se recuperan por completo del COVID-19 en 4 a 6 semanas.
Lo sorprendente, dijo el Dr. Koralnik, fue que los pacientes, a pesar de no necesitar hospitalización, tenían síntomas persistentes y debilitantes durante meses después de la aparición de los síntomas.
Los investigadores también encontraron que la recuperación de los síntomas parecía variar mucho de un paciente a otro, por lo que era difícil predecir si un síntoma específico probablemente se resolvería dentro de un cierto periodo de tiempo.
Para rastrear el progreso de los pacientes, los investigadores utilizaron el sistema Patient-Reported Outcomes Measurement Information (PROMIS) y las evaluaciones cognitivas de National Institutes of Health (NIH), entre otras medidas.
Tabla. Los 10 síntomas más frecuentes
Síntoma | Frecuencia |
---|---|
Disfunción cognitiva | 81% |
Dolor de cabeza | 68% |
Entumecimiento u hormigueo | 60% |
Trastornos del gusto | 59% |
Trastornos del olfato | 55% |
Dolor muscular | 55% |
Mareos | 47% |
Dolor | 43% |
Visión borrosa | 30% |
Tinnitus | 29% |
Participantes del estudio (70% mujeres, edad promedio: 43 años) |
Además, se informaron muchos síntomas no neurológicos, que incluyeron:
Fatiga, 85%
Depresión o ansiedad, 47%
Dificultad para respirar, 46%
Dolor de pecho, 37%
Insomnio, 33%
Variación de la frecuencia cardiaca y la presión arterial, 30%
Molestias gastrointestinales, 29%
Los investigadores siguieron a 50 pacientes con COVID-19 persistente con pruebas de laboratorio positivas y 50 con pruebas de laboratorio negativas, aunque todos cumplieron con la definición de COVID-19 según los criterios establecidos por la Infectious Diseases Society of America, dijo el Dr. Koralnik.
Esto refleja las limitaciones de las primeras pruebas, agregó. Al principio de la pandemia, las personas a menudo no podían hacerse una prueba, no podían hacerse una prueba en el período de tiempo que detectaría con precisión la infección o tenían acceso a pruebas que no eran lo suficientemente sensibles para detectar la infección con precisión, anotó.
Los pacientes residían en 21 estados; 52 fueron atendidos en persona y 48 por telemedicina en una clínica de neuro COVID-19. Tenían evaluaciones cognitivas limitadas o completas y los problemas de memoria y de déficit de atención eran frecuentes.
Muchos pacientes (42%) informaron depresión o ansiedad antes del diagnóstico de COVID-19, dijo el Dr. Koralnik, lo que sugiere una "vulnerabilidad neuropsiquiátrica" para desarrollar COVID-19 persistente.
Aproximadamente 70% de los pacientes con COVID-19 persistente eran mujeres y 16% tenía trastornos autoinmunes preexistentes. Este perfil, puntualizó el Dr. Koralnik, se asemeja a la proporción entre mujeres y hombres de enfermedades autoinmunes como esclerosis múltiple o artritis reumatoide.
Aunque el estudio no tuvo como objetivo explicar por qué algunos pacientes desarrollan COVID-19 persistente, sugiere que pueden estar en juego mecanismos autoinmunes posinfecciosos, señalaron los investigadores.
La gama de síntomas varió ampliamente, y algunos pacientes experimentaron deterioro cognitivo y mareos, sin problemas de olfato o gusto, o viceversa, dijo el Dr. Koralnik.
Aún no es posible predecir la recuperación de síntomas específicos, anotó. "La gente tiende a mejorar con el tiempo, pero lo hace a su propio ritmo".
"Esperábamos que cuanto más lejano fuera el inicio de la enfermedad, mejor se sentiría el paciente recuperado. De hecho, ese no fue el caso", agregó el Dr. Koralnik.
Algunos informaron que se recuperaron en un 95% después de 2 meses, mientras que a 10% le tomó 9 meses. Eso significa que es imposible decirle a un paciente con síntomas específicos que espere una recuperación después de un periodo de tiempo específico, anotó.
Reflejo de la práctica clínica
Al comentar los hallazgos para Medscape Noticias Médicas, la Dra. Allison Navis, profesora de enfermedades neuroinfecciosas en la Icahn School of Medicine en Mount Sinai, Nueva York, Estados Unidos, y neuróloga clínica en el Post-COVID Center del Mount Sinai, dijo que los resultados reflejan la práctica clínica y señaló que ha visto al menos 200 pacientes con COVID-19 persistente.
Agradeció el enfoque del estudio en los síntomas neurológicos y señaló: "No entendemos del todo lo que está sucediendo" con los pacientes con enfermedad prolongada.
"Estamos viendo una mejoría en muchas personas, pero está tomando algún tiempo. Para algunos de los síntomas más debilitantes, tenemos tratamientos", como medicamentos efectivos para el dolor de cabeza.
Un punto prometedor del estudio, dijo la Dra. Navis, quien no participó en la investigación, es la idea de que los síntomas a largo plazo podrían ser una respuesta autoinmune, tal vez similar a algunos otros síndromes posteriores a la infección.
El estudio muestra que es importante no desestimar los síntomas persistentes de los pacientes. "Solo decir 'supéralo' no es el enfoque correcto", concluyó la Dra. Allis.
No se mencionó ninguna fuente de financiamiento. Los autores del estudio declararon no tener conflictos de interés económico pertinentes.
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Citar este artículo: Síntomas neurológicos frecuentes en pacientes ambulatorios con COVID-19 persistente - Medscape - 26 de marzo de 2021.
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