MÉRIDA, MEX. La radioterapia continúa siendo una herramienta importante en el tratamiento de los tumores pediátricos, sin embargo, deja secuelas con efectos a largo plazo, que impactarán el desarrollo y la vida adulta de los pacientes, por lo que se ha vuelto necesario darles seguimiento adecuado, así como implementar regímenes menos tóxicos, discutieron expertos durante el 37° Congreso Nacional de Oncología de la Sociedad Mexicana de Oncología (SMeO) en Mérida, México.[1]
El tratamiento por radioterapia ha demostrado ser la mayor contribución al desarrollo de la toxicidad tardía con efectos adversos como hipertensión, diabetes, deficiencia a la hormona del crecimiento, insuficiencia ovárica, esterilidad, impacto en el desarrollo neurocognitivo, y déficit de aprendizaje, entre otros, casi todos a largo plazo.[2]

Dra. Beatriz García Robles
Sin embargo, la Dra. Beatriz García Robles explicó que no identificamos estos efectos adversos porque los niños se pierden dentro del sistema de salud. "Llegamos a decir: ‘Está curado’, pero no alcanzamos a ver cuál es el desarrollo de estos niños a lo largo del tiempo".
Al respecto, recomendó tomar en cuenta los posibles efectos adversos y hablarlos con los padres desde la valoración inicial, así como dar recomendaciones de seguimiento, porque muchos niños dejan las consultas, y no es hasta años después que empiezan a ver los efectos adversos.
"Últimamente ha habido mayor cuidado en identificar tanto sobrevivientes como riesgos de morbilidad y mortalidad tardías", comentó la Dra. García. Para ello ya existen estudios que ayudan a la detección temprana y al establecimiento de campañas de cuidado sanitario, así como guías de cuidado a largo plazo en sobrevivientes de instancias, como el Children´s Oncology Group, la National Comprehensive CancerNetwork, el Scottish Intercollegiate Guideline Network y el UKChildren's Cancer Study Group.[3,4]
Más aún, ha disminuido el uso de radioterapia en el manejo de las neoplasias infantiles. "Prácticamente son muy pocos los casos en los que podemos ofrecer tratamiento con radiación, y generalmente se ve limitado hacia la radiación corporal total o en pacientes que tienen recaída persistente al sistema nervioso central", indicó la Dra. García.
Sin embargo, para los casos en que sea necesario radiar, hay nuevas tecnologías, como el dose painting y la radioterapia adaptativa, que reducen las toxicidades al mínimo.

Dra. Dolores de la Mata
"El dose painting forma parte de muchas cosas que hacemos en el día a día", señaló la Dra. Dolores de la Mata, jefa del servicio de radioterapia del Centro Médico ABC. Esta técnica consiste en la prescripción de una distribución de dosis de radiación no uniforme al tumor, con base en imágenes funcionales o moleculares que indican el riesgo local de recaída.
Si bien el dose painting depende un poco de tecnologías como simulación virtual y software para modular la intensidad del haz de luz y concentrarlo en regiones específicas, la Dra. De la Mata enfatizó que esta técnica no supone un gran costo, sino un mayor esfuerzo por parte del equipo médico para planear el tratamiento.
"Depende mucho del diseño que el radiooncólogo haga de la estrategia. Es importante ver la historia clínica, el tumor, su relación con los órganos de riesgo, hacer la simulación y una planeación cuidadosa; que nos sentemos con el físico y digamos: ‘Así queremos los órganos de riesgo’".
También es posible utilizar la radioterapia adaptativa, que va ajustando las dosis de tratamiento dependiendo del tamaño del tumor; este puede ir disminuyendo, pero los campos profilácticos no cambian y es importante proteger al paciente. "Nos percatamos de que con intensidad modulada era más sencillo hacer diferentes volúmenes; conforme el tumor se va a haciendo más pequeño podemos cambiar nuestro plan de tratamiento", explicó la especialista.
Actualmente en México este tipo de prácticas se realiza de manera cotidiana en múltiples centros de salud para tumores cervicouterinos, de cabeza y cuello, braquiterapia, y en cualquier paciente con metástasis o tumores grandes radiorresistentes que no presentaban buenos resultados con la radioterapia estándar.
Por el momento todo el trabajo de planeación e interpretación de imágenes sigue recayendo en médicos y radiólogos, pero ya existen equipos que lo están haciendo de forma automatizada, pero aún no hay ninguno en Latinoamérica, comentó a Medscape en Español la Dra. De la Mata.
Asimismo, explicó que esta podría ser una buena alternativa para el cáncer infantil, pero que por el momento no hay aún estudios publicados. "Se realiza, pero tenemos que estandarizarlo en nuestra práctica diaria, de lo individual a lo general. Por el momento solo es empírico".
Mientras tanto, la Dra. García recomendó a la comunidad médica establecer una docimetría de dosis, volumen y efecto en tejidos sanos pediátricos; no tratar a ningún niño en cobalto, sino en un acelerador lineal, y tomar en cuenta los factores de riesgo sociales en favor del desarrollo óptimo del niño. "Tenemos que abogar por la plasticidad cerebral, que hagan ejercicios de estimulación, evitar el estigma y el sobrediagnóstico. Necesitamos formar clínicas de adolescentes y adultos jóvenes", concluyó.
Siga a Myriam Vidal de Medscape en Español, en Twitter @myriam_vidalv.
Para más contenido siga a Medscape en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube.
© 2019 WebMD, LLC
Cualesquiera puntos de vista expresados antes son del propio autor y no necesariamente reflejan los puntos de vista de WebMd o Medscape.
Citar este artículo: Alternativas para reducir la toxicidad y tratar efectos tardíos en cáncer infantil - Medscape - 20 de nov de 2019.
Comentario