REVISIÓN

Actualice sus conocimientos sobre miocardiopatía hipertrófica

Dr. Juan Pablo Costabel

Conflictos de interés

12 de febrero de 2019

COLABORACIÓN EDITORIAL

Medscape &

El ejercicio de alto impacto produce cambios fisiológicos en el corazón de los atletas, tales como aumento de los espesores parietales, de los volúmenes ventriculares y de la masa ventricular. En este sentido, puede ser difícil hacer el diagnóstico diferencial con miocardiopatía hipertrófica. El análisis de la función diastólica, las velocidades tisulares, la deformación miocárdica y la caracterización tisular por resonancia magnética cardiaca son útiles en el diagnóstico diferencial.

Habitualmente los deportistas no presentan espesor parietal que supere los 17 mm en hombres y los 15 a 16 mm en mujeres.[3,4,5,6] Por otro lado, no presentan disfunción diastólica medida por parámetros convencionales de llenado mitral o avanzados de tisular o deformación en la tasa de deformación (strain rate). El electrocardiograma puede presentar signos de hipertrofia ventricular, pero habitualmente no se ven alteraciones de la repolarización que son características de la miocardiopatía hipertrófica.

La distribución de la hipertrofia suele ser homogénea en los deportistas frente a la asimétrica distribución de la miocardiopatía hipertrófica. El hallazgo de focos de realce tardío de gadolinio orienta hacia la miocardiopatía hipertrófica. Una acción que puede ayudar en casos dudosos es realizar el desentrenamiento del individuo. Una reducción de la masa ventricular mayor a 20% luego de 3 meses orienta a hipertrofia fisiológica.

Comentario

3090D553-9492-4563-8681-AD288FA52ACE
Los comentarios están sujetos a moderación. Por favor, consulte los Términos de Uso del foro

procesando....